Compara la revolución industrial española con la de los países más avanzados de europa.
Compara la revolución industrial española con la de los países más avanzados de europa.
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producción industrial por países en 2020
Este artículo analiza los datos recientes sobre la producción industrial en la Unión Europea (UE), así como en algunos países de la AELC y candidatos, a partir de los resultados de las estadísticas de producción industrial (PRODCOM). Chipre, Malta y Luxemburgo están exentos de la recogida de datos PRODCOM y, por lo tanto, no hay datos disponibles. Los datos presentados en este artículo se recogen en el marco del reglamento de producción industrial y cubren las actividades de las secciones B y C (Explotación de minas y canteras y Fabricación) de la clasificación NACE Rev. 2 y desde 2019 la actividad 38.32 Recuperación de materiales clasificados.
El valor de la producción vendida en la Unión Europea en 2020 disminuyó un 7 % en comparación con 2019. Este descenso se debió principalmente a la disminución de la fabricación de vehículos de motor, remolques y semirremolques y otros equipos de transporte, de la fabricación de muebles y otras manufacturas, de la fabricación de maquinaria y equipos n.c.o.p. y de la fabricación de metales básicos y productos metálicos manufacturados.
El gráfico 2 muestra la cuota del valor de la producción vendida en la UE, por Estados miembros individuales de la UE en 2020. Seis Estados miembros de la UE generaron tres cuartas partes del valor de la producción vendida de la UE (76 %). Alemania registró el mayor valor de la producción vendida, equivalente al 29 % del total de la UE, seguida de Italia (18 %), Francia (12 %), España (9 %), Polonia (5 %) y los Países Bajos (3 %). Los otros 21 Estados miembros de la UE contribuyeron con porcentajes menores (hasta el 3 %).
la cuarta revolución industrial
La digitalización está creciendo más rápido que la actividad económica y seguirá haciéndolo en el futuro. Sin embargo, para aprovechar las oportunidades que este proceso ofrece a las empresas españolas, es necesario superar una serie de retos. Entre ellos, mejorar las infraestructuras, garantizar la ciberseguridad y eliminar las barreras al comercio electrónico. Así lo cree Rafael Doménech, que ha presentado el estudio “El impacto de la digitalización en las empresas españolas”.
En este sentido, el presidente de la Cámara de España, José Luis Bonet, insistió en que “las empresas deben darse cuenta de que la digitalización y la innovación no son una opción, sino una condición imprescindible para asegurar su supervivencia y progreso. Por ello, debe producirse un cambio de mentalidad empresarial, especialmente entre las pymes, para que entiendan los nuevos retos a los que se enfrentan.”
Uno de los factores de la digitalización que puede ser decisivo para la competitividad de las empresas, son los datos. Siempre que se habla de big data, machine learning o la ciencia de los datos en general, se asume que son especialidades reservadas a las grandes corporaciones, cuando en realidad pueden ser utilizadas por cualquier empresa.
estadísticas de la industria manufacturera en europa
Desde que comenzó lo que conocemos como la cuarta revolución industrial, la Industria 4.0 se ha convertido en un objetivo para todos los países con plantas de fabricación. Sin embargo, las políticas aplicadas en cada uno de ellos son diferentes en relación a cómo se lleva a cabo la implementación, el diseño y la financiación. Muchos gobiernos de diferentes países están llevando a cabo planes e iniciativas para promover la digitalización y modernización de las fábricas. En este post puedes leer previamente qué tecnologías se consideran Industria 4.0.
La Industria 4.0 es un mercado que mueve muchos millones en el mundo. En concreto, se estima que en 2019 se instalaron sistemas por valor de más de 71.700 millones de euros en todo el mundo y en 2024, este valor será de 156.600 millones de euros, lo que supone un crecimiento anual de este mercado del 16%.
Sólo el 17% de los líderes empresariales, afirman que la inversión en tecnologías de la Industria 4.0 es una prioridad de sus organizaciones, frente a otras 12 prioridades de inversión. Además, solo el 5% ha avanzado en su implantación de forma integrada en sus empresas.
producción industrial en europa por países
Estimaciones de Maddison sobre el PIB per cápita en paridad de poder adquisitivo en dólares internacionales de 1990 para determinadas naciones europeas y asiáticas entre 1500 y 1950,[1] mostrando el crecimiento explosivo de Europa Occidental y Japón desde principios del siglo XIX.
La Gran Divergencia o milagro europeo es el cambio socioeconómico en el que el mundo occidental (es decir, Europa Occidental y las partes del Nuevo Mundo donde sus habitantes se convirtieron en las poblaciones dominantes) superó las limitaciones de crecimiento premodernas y emergió durante el siglo XIX como la civilización mundial más poderosa y rica, eclipsando a la India mogol, la China Qing, la Corea Joseon y el Japón Tokugawa.
Los estudiosos han propuesto una gran variedad de teorías para explicar por qué se produjo la Gran Divergencia, incluyendo la geografía, la cultura, las instituciones, el colonialismo, los recursos y la pura casualidad[3]. [3] Hay desacuerdo sobre la nomenclatura de la “gran” divergencia, ya que tradicionalmente se considera que el punto de inicio de la divergencia es el siglo XVI o incluso el XV, con la revolución comercial y los orígenes del mercantilismo y el capitalismo durante el Renacimiento y el Siglo de los Descubrimientos, el auge de los imperios coloniales europeos, la protoglobalización, la Revolución Científica o el Siglo de las Luces. [4][5][6][7] Sin embargo, el mayor salto en la divergencia se produjo a finales del siglo XVIII y en el XIX con la Revolución Industrial y la Revolución Tecnológica. Por ello, la “escuela californiana” considera que la gran divergencia es sólo ésta[8][9][10][11].